Taylor Swift como nunca la habías visto antes | Vogue Magazine

Taylor es portada de edición de mayo de la revista Vogue (Estados Unidos). En el artículo que os dejamos traducido a continuación, Se tratan temas como la infancia de Taylor, la boda de su amiga Britany, sus planes de futuro, sus pensamientos sobre el amor, y otros temas.


Taylor Swift como nunca la habías visto antes

Artículo por Jason Gay, fotografía por Mert Alas y Marcus Piggott, traducción por El Rincón de Taylor


Reina del pop, agente de poder, vencedora ante los enemigos — Taylor Swift nunca ha brillado más. En un viaje a su casa de la infancia se pregunta: ¿Qué será lo próximo que haga?

A estas alturas ya sabes que los últimos años de la vida de Taylor Swift han sido extraordinarios. Incluso si sólo tienes algunos conocimientos sobre la música de Swift —puede que queden unas seis o siete personas en la tierra que no puedan cantar "Shake It Off"— eres consciente de que Swift se ha convertido no sólo en una de las artistas más exitosas, pero también es una persona con un poder inigualable que ha prevalecido en una economía de medios inestables y que ha traído la música de hoy en día a flote. La desaprobación hacia Apple en 2015 – se negó a poner su álbum 1989 en el nuevo servicio de música en streaming cuando la empresa dijo que no pagaría a los artistas durante el periodo de lanzamiento, Apple cambió su política inmediatamente y pagó a todo el mundo – fue un ejemplo de cómo un solo artista puede derribar una potencia corporativa. Con 26 años, Swift es mundialmente famosa, rica, criticada, una influencer de estilo y un movimiento cultural sobre sí misma, reconocible allá donde vaya. También tiene dos gatos increíbles.

Y sin embargo, hoy, en esta capilla en la cima de una colina en Reading, Pennsylvania, Swift no es ninguna de esas cosas. Ella es la dama de honor en la boda de su amiga de la infancia Britany Maack. Swift y Maack se conocen desde que Swift tenía 10 días – hay vídeos caseros de mala calidad de las dos en la cuna juntas y, más recientemente, fotos de ellas sentadas juntas en los Grammys 2014. La pasada primavera, después de que Swift aceptara la invitación de ser la dama de honor a través de Instagram, llevó a Maack a Ree Acra, donde Britany consiguió su vestido de novia de seda de tafetán bordado a mano de encargo, y Taylor su vestido de dama de honor rosado que lleva puesto hoy (la prueba también se subió a Instagram, naturalmente). Swift incluso conoce al novio, Benjamin LaManna, desde la guardería, e incluso admite haber estado algo pillada por Ben en aquel entonces, cuando era “ese chico que se sentaba a mi lado en clase con el corte de tazón y fiambrera de Lego”.

Swift no ha estado en Reading en más de una década, tenía 14 años cuando se trasladó con su familia a Nashville, de camino a convertirse en cantante y compositora de música Country y más tarde convertirse en una de las mayores artistas de pop de la historia de la música. Volver al lugar donde creciste puede ser un poco impactante para cualquier persona, y Swift no es diferente. Durante un viaje en coche desde muy temprano, señalaba con entusiasmo lugares: el arroyo donde ella y Britany jugaban de pequeñas, una casa en un árbol en el patio delantero de la antigua casa de la familia Maack; los bosques de pinos en los que ella y sus amigos pensaban que eran perseguidos.

"Fue algo muy surrealista y emocional", dice Swift. "Cuando eres un niño pequeño, haces el mismo camino para ir a la escuela todos los días, cientos de veces. Cuando vuelves, te entra una nostalgia extraña.

¡Y la iglesia! Hay monjas en la Capilla del Sagrado Corazón que le enseñan a Swift en el jardín de infantes. Muchos de los invitados a la boda la conocen desde hace tiempo. Para ellos, Swift no es la superestrella que, hace unos días, subió a un escenario en Los Ángeles y aceptó un Grammy a Álbum del Año, la primera mujer en ganar el premio dos veces. No, esa dama de honor, ahora mismo quejándose y tratando de enderezar el vestido de la novia, es Taylor – la hija mayor de Andrea y Scott Swift, la hermana mayor de Austin, que creció en un lugar a apenas cinco minutos en coche y que solía ir a por helados a Friendly’s al final de la calle.

Para que quede claro: no estoy diciendo que la gente en esta iglesia no sea consciente de en quién se ha convertido la hija de Andrea y Scott. Ya sabes, la increíble Taylor Swift – es gracioso ver las chicas de las flores tratando de no perder la cabeza, y las monjas también parecen bastante asombradas – pero esa no es la historia hoy. Son Brittany y Ben. La única evidencia de que la dama de honor es quien ya sabéis son los paparazzis que se han reunido a lo alto de la colina, esperando sacar alguna foto con sus grandes lentes.

Tenemos que hablar sobre la granja de árboles de Navidad.

Una subtítulo atesorado de la historia de Taylor Swift es que pasó gran parte de su infancia en, de todos los lugares, una granja de árboles de navidad llamada Pine Ridge Fam. Es el típico detalle llamativo que suena como demasiado precioso, demasiado bueno para ser verdad. ¿No trabajaban sus padres en finanzas? ¿No creció en las afueras? ¿Cómo es posible que esto sea real? ¡Venga, hombre!

Pero la granja de árboles de Navidad es real. Me la enseño ella misma.

Es la mañana de la boda, estoy montando en un SUV con Swift y su madre, Andrea. Andrea nos conduce por la carretera, y Swift, vestida con una chaqueta de Reformation de color caramelo y unos pantalones vaqueros negros, está sentado en el asiento del copiloto. Esta área alrededor de Reading y su ciudad, Wyomissing, es rica en caminos marcados por campos abiertos, casas de piedra y la clase de campo que hace que quieras ensillar y montar a caballo – lo cual hizo Swift de pequeña.

Eso era como algo de mi madre,” dice Taylor. “Ella quería con todas sus fuerzas que fuese jinete, y lo hacía de manera competitiva hasta que a los 12 años me di cuenta de que en realidad no me gustaba tanto como a ella le gustaba. Yo sólo quería hacer música y teatro,” dice ella. “Así que fui una gran decepción.

Ya he superado la amargura, por fin,” dice Andrea con sarcasmo.

Pronto llegamos a un claro con un granero y una pequeña casa de campo. Este es el lugar, me dicen. Taylor y Andrea no han llamado ni han hecho arreglos sobre la visita. Va a ser una aparición aleatoria de una estrella del pop, como el de Taylor Swift Publishers Clearing House Sweepstakes o algo así.
Taylor ve a un hombre caminando hacia su coche por el camino. Nos colocamos a un lado, y Andrea baja su ventanilla. Taylor se inclina: “Solía vivir aquí”, dice alegremente.

El hombre inmediatamente marca una mirada que solo puede ser descrita como un “Oh Dios mío es Taylor Swift”. “Ya lo sé”, dice, como si fuera una señal.

Todo el mundo se ríe. El hombre es Dave Schaeffer, y vive aquí con su esposa Debbie desde hace unos seis años. Nos invitan a echar un vistazo alrededor, y vamos todos a ello.

"Esto sí que debe traer de vuelta algunos recuerdos", dice Dave.

"Sí, es una locura", dice Taylor. Mira los campos detrás de la calzada, que incluyen un pequeño bosque de pinos que sus padres plantaron. Ahora están lo suficientemente altos como para usarlos para la Navidad en el Rockefeller Center. "Es bonito."

Aquí es donde, me dice Andrea, Taylor Swift fue llevada a casa desde el hospital en, bueno, 1989 – supongo que ahora ya sabe todo el mundo el año de nacimiento de Taylor. La verja del ferrocarril todavía está – Scott y Andrea la construyeron ellos mismos. Scott, un corredor de bolsa, en realidad adquirió y vivió en la propiedad antes conocer a Andrea; en su primera cita, ella vino a una fiesta en la granja.

Debbie sale y se presenta a sí misma. "Siempre pensé que quizá te quisieras pasar por aquí", dice ella. "Pero yo nunca quise molestarte." Los Schaeffer confiesan que vivieron aquí un tiempo antes de saber de la famosa residente anterior. "Nos lo dijo el chico de la pizza," dice Debbie. "No teníamos ni idea."

Invita a todo el mundo dentro. Entramos en la acogedora casa de dos plantas, Taylor saca su móvil y empieza a grabar. Ahí está la sala de estar en la que los Swift ponían su árbol de navidad. Ahí está donde estuvo el piano en su día.

Casey, la hija de Dave y Debbie, llega. En realidad es la dueña de la casa junto a su esposo y vive cerca. Ella está encantada, pero también fuera de sí porque sus hijas están fuera porque han ido a esquiar.

¿Quieres ver tu habitación?” Le pregunta Debbie a Taylor.

Subimos las escaleras a una pequeña habitación arrinconada en la que Taylor solía acabar tres libros y cinco canciones cada noche. Taylor junta a toda la familia para hacer un vídeo rápido para las nietas de los Schaeffers, Siena y Tarah.

Hola, Siena y Tarah”, dice Taylor alegremente. “Esta era mi habitación antes. Ojalá estuvieseis aquí”.

No puedo mentir: Todo en lo que puedo pensar es en Siena y Tarah volviendo de su viaje a esquiar y enterarse de que Taylor Swift ha estado en la casa de sus abuelos, y decidir en el momento que no volverán a ir a esquiar.

En el viaje de vuelta, Andrea y Taylor están encantadas por lo que acaba de pasar, por ese trato tan dulce y educado, y completamente emocionadas por toda la experiencia. "Mi fe en la humanidad se restaura," dice Taylor.

Y luego vuelve la cabeza rápidamente a la ventana: los paparazzi.

Sí: Debo señalar que cuando llegamos a la granja, un par de agentes de seguridad de Swift nos informaron de que había por lo menos un trío de fotógrafos no invitados que nos habían seguido a la ubicación para coger fotos interesantes y sexys sobre la visita a la granja. Para Swift, esto es tan sorprendente como… ¿Qué es lo contrario de sorprendente? Este es su estado constante. Vive con ello, se adapta a ello. Hace algunos años, Swift estaba muy entusiasmada con volver a poner a Nueva York – era la base creativa para 1989 – pero ahora cuando está en la ciudad, en un par de días, hay un circo de fotógrafos alrededor de su edificio.


"Pero ese tipo de cosas ocurren en todas partes", dice ella. La ceremonia de la boda ha terminado – Brittany y Ben lo han hecho oficial entre aplausos – y Swift y yo nos hemos reunido en el piso de abajo durante una pausa antes de la recepción.

Le pregunto: ¿Cuándo fue la última vez que estuviste en un sitio donde nadie en la prensa tuviera idea que estabas allí – sin periodistas ni fotógrafos?

Mmmm, Colorado está bien," dice ella. "Si voy a algún lugar y me quedo en una casa, nadie lo sabe."

Swift dice que está preparada para pasar inadvertida. Después de la boda, irá a Nueva York, donde será vista cenando con su amiga Lena Dunham, y luego será vista una semana más tarde en Los Ángeles con su hermano, Austin, y su amiga Lorde en la Vanity Fair Oscar Party. En cuanto a los planes futuros. . . ¿quién sabe? Por primera vez en años, Swift no está segura exactamente de qué es lo siguiente. . Y está satisfecha con ello.

Entonces, ¿qué diablos va a hacer con el resto de su vida, Taylor Swift?

"No tengo ni idea", dice ella, con un suspiro que es más de felicidad que de ansiedad. "Esta es la primera vez en diez años que no lo sé. Acabo de decidir que después del año pasado, con todas las cosas increíbles que sucedieron. . . Decidí que iba a vivir mi vida un poco sin tener esa presión sobre mí de tener que crear algo”.

No os asustéis: Swift no deja de hacer música. Los que la conocen saben que eso es químicamente imposible. ("Que no sea creativa es una de las últimas cosas de las que hay que preocuparse," me dice más adelante el músico y productor Jack Antonoff.)

"Siempre voy a estar escribiendo canciones", explica Swift. "La cosa es que, a mí, podrían perfectamente venirme tres cosas en las próximas dos semanas y luego volver al estudio, y de repente, empezaría el nuevo disco. Esa es una opción, también.

Pero probablemente no por el momento. "Realmente me gustaría tener un poco de tiempo para aprender cosas", explica Swift. "Tengo un montón de objetivos a corto plazo."

¿Cómo por ejemplo?

"Quiero ser una persona bien madura que sepa hacer una buena bebida." (Puedo confirmar a partir del cóctel de boda que Taylor Swift disfruta de un Old Fashioned y sabe cómo hacer uno.)

¿Algo más?

"Ser capaz de salvar a alguien que se esté ahogando", dice ella. Va completamente en serio. "Reanimación cardiopulmonar, todos los tipos de las compresiones torácicas. La gente te dice algunos consejos, pero eso es diferente a dar una clase y obtener un certificado.

¿Sabes cambiar una rueda?

"No. Probablemente también debería aprender a hacer eso.”

"Hago cosas como esta", explica Swift. Una vez, "tenía en mi cabeza que no podía hacer el espagat, y a mí me molestaba mucho eso. Así que estiré diariamente durante un año hasta que lo logré. De alguna manera me siento mejor al saber que puedo hacerlo”.

Le pregunto si alguna vez se ha planteado lanzar una línea de moda.

"En teoría, sí", dice ella. "Pero quiero que sea algo con lo que sea fácil identificarse y que sea accesible y cotidiano. No veo que sea de alta costura. Me gustaría que fuese un reflejo de mi estilo. Y muchas de las cosas que llevo no son muy caras.”

En mayo, Swift co-representará la gala Metropolitan Museum of Art Costume Institute’s 2016, para la exhibición “Manus x Machina: Fashion in an Age of Technology.” Es un tópico que Swift – fácilmente uno de los mayores iconos de estilo de la era de las redes sociales – entienda mejor que la mayoría, de la capacidad de la tecnología para dar forma a las tendencias y su creciente influencia en la creatividad y el diseño.

El estilo personal de Swift, como es lógico, ha madurado a lo largo de su carrera, pasando de los primeros días de vestidos de verano y, como ella los describe, "botas de vaquero deslumbrado" a llevar ropa vintage con estilo de los años 50, hasta ahora más elegante, consciente de lo que le favorece. “Puedo ver una foto vieja y decirte de qué año es,” dice Swift. “Pasar por diferentes fases es una de mis cosas favoritas de la moda. Me encanta como puede marcar el paso del tiempo. Es similar a mis canciones en ese sentido – todo eso ayuda a identificar donde me encontraba en diferentes puntos de mi vida”.

Su estilo nunca ha sido deliberadamente provocativo ni persiguiendo modas, al contrario, siempre está todo como adaptado a Swift, una cualidad que comparte con su amiga la modelo criada en Midwest Karlie Kloss, y sin embargo es fácil ver cierta curiosidad sobre cosas nuevas. Hace poco, Swift se hizo un corte bob, y se le ha visto con unas botas algo góticas por encima del tobillo que parecen robadas del armario Siouxsie Sioux. Como de costumbre, los cambios son pequeños, reconocibles, Swift es un genio, tanto en la música como en todo lo demás, una experimentación sin alienación. El estilo de Swift nunca trata de ser demasiado duro ni que parezcan ansias publicitarias; de todas formas, todo el mundo ya está atento a lo que hace.

Como yo soy una bola de queso desesperanzada, no puedo evitar preguntarme: Al formar parte de esta boda, ¿tiene Swift pensado casarse algún día? Desde el año pasado, ha estado con el DJ-Productor escocés Calvin Harris. Harris no está aquí con ella, pero a principios de marzo, él y Swift publicaron imágenes cursis en las redes sociales – él en Snapchat; ella en Instagram – conmemorando el primer año de su relación. Después de esto, ambos publicaron fotografías de unas vacaciones idílicas y desconocidas en el trópico, con un “TS + AW” escrito en la arena. (El nombre real de Harris es Adam Wiles.)

"Sólo estoy tomándome las cosas tal y como me vienen", explica Swift. "Ahora mismo estoy en una relación mágica. Y por supuesto que quiero que sea nuestra, y de bajo perfil... esta es la única cosa que ha sido mía sobre mi vida personal.

La amiga de Swift, Lorde, cree que Swift solo puede retirarse un tiempo de la música. “Hablamos de esto – con el fin de hacer un buen trabajo, escribimos estos registros profundamente personales, estamos constantemente tratando de entender nuestros pensamientos. A veces te sientes como si fueses un experto escribiendo una tesis sobre tu propio cerebro", dice Lorde. "Así que creo que solo va a tratar de aprender cosas nuevas, tal vez hacer cursos en algo. Tay es muy fan de tomarse un tiempo libre – y después tiene esa mirada en sus ojos, y sé que las noticias, el yogur helado y lo de andar por ahí está a punto de salir por la ventana."

Aquí en la planta sótano del club de campo, donde la novia se está ajustando su vestido, Swift y yo escuchamos la fiesta tomar fuerza. Un par de damas de honor pasan. Swift les choca los cinco.

"Honestamente, yo nunca me relajo, y estoy entusiasmada de poder relajarme por primera vez en diez años," dice ella.

Swift toma un sorbo de su Old Fashioned. "Me siento relajada ahora mismo."

Unos días antes, Swift había estado en el centro de todo. En su discurso de aceptación al Grammy por Álbum del Año, lanzó emotivas palabras a las mujeres de la audiencia, pero también hizo lo que se presume que es una respuesta indirecta a Kanye West, que había lanzado una nueva canción la que había aseguraba que había hecho famosa a Swift y teorizaba que ambos tendrían relaciones sexuales algún día. La historia se mantuvo en los medios de comunicación durante las próximas 72 horas y, en general me dieron ganas de ponerme un cubo de metal en la cabeza y golpearlo con fuerza contra una pared.

Todo este sinsentido de Kayne contra Taylor – que comenzó, por supuesto, hace siete años, cuando West interrumpió a Swift en los MTV Video Music Awards en su discurso de aceptación para discutir que Beyoncé debería haber ganado – ¿no había terminado ya? Taylor Nation estaba atónitos. Austin Swift publicó un vídeo en Instagram en el que casualmente tiraba un par de las Adidas Yeezy de West a la basura.

Le dije a Swift que todo me recordó a la famosa cita de Al Pacino como Michael Corleone en El Padrino Parte III.

Pensaba que estaba fuera…

Swift sabe exactamente a donde voy y la termina: “¡Y me vuelven a meter!

Creo que al mundo le aburre ya el tema,” continúa. “No quiero añadir nada más, porque luego habrá más.

Entiendo por qué Swift no querría aumentar la controversia, pero no es difícil ver una conexión entre la canción de West y la larga tradición de los hombres de ser despectivos – tanto activamente como subconscientemente – hacia el trabajo duro y el éxito de las mujeres. Este es un tema sobre el que Swift se ha endurecido, después de haber pasado gran parte de sus primeros años siendo reconocida no por sus dotes de composición (a pesar de que ahora casi todo el mundo está de acuerdo en que son raros y especiales), sino por la gente con la que estaba saliendo, su fama se resumía en lo que Swift llama "diapositivas de los hombres-increíblemente-sexistas-de-Taylor Swift”.

"Ya sabes, tuve muchas citas con 20 años, y fui totalmente criticada por ello,” dice ella. "Y me llevó mucho trabajo duro y mucha alteración al tomar decisiones. No tuve citas durante dos años y medio. ¿Debería haber hecho eso? No”.

"Creo que lo que quería que llamase la atención de mi discurso en los Grammys es lo difícil que va a ser si eres una mujer que quiere conseguir algo en su vida – no importa qué,” añade.

El día de después de los premios, Swift se fue de compras a Barneys en Beverly Hills – “Estaba en plan: ‘Voy a comprarme unos zapatos bonitos hoy’” – y dice que se le acercaron varias mujeres, en particular, madres, que le dieron las gracias. “Su respuesta fue muy bonita. Nunca sabes cuál va a ser la respuesta de la gente. Así que cuando es buena, es muy bonito.”

Swift ha alcanzado un nivel de fama en que el drama simplemente la encuentra. Las presentaciones de los hombres de Taylor Swift se han calmado, pero ahora pasa a por su “squad” de amigas famosas, quienes, dependiendo de quien sea, son o demasiado glamurosas, o falsas, o una combinación de los dos.

"Uf," dice Swift cuando saco el tema. "La gente ha dicho cosas muy hirientes sobre mí, y también he aprendido a medirlo: "Hace daño a un nivel medio-bajo”.

"Hay un montón de maneras muy fáciles de disipar rumores", explica. "Si dicen que estás embarazada, todo lo que tienes que hacer es seguir sin estar embarazada y no tener un bebé. Si el rumor es que tienes amistades falsas, todo lo que tienes que hacer es seguir estando ahí para los demás. Y cuando estemos todos los amigos juntos en quince años criando a nuestros hijos juntos, tal vez alguien va a mire hacia atrás y diga “Fue un poco ridículo lo que dijimos sobre Taylor y sus amigos”".

Es como si Swift se hubiera convertido en algo tan grande y que atrae tanto a un objetivo, que ya no es una mera persona, sino un símbolo cultural de la cualquier cosa se puede exigir. Jack Antonoff describe el estado de Swift como "casi como ser presidente." Y añade: "Es la más grande, aunque una gran cantidad de gente ha sido la más grande. Pero no mucha gente ha sido la más grande y la mejor, y ella lo es.

Todo eso parece a un millón de años luz de distancia, aquí, de vuelta en la casa, entre amigos, en la boda de Britany. Antes de salir, Swift hace una petición: Tiene que practicar su discurso de dama de honor. Ahora.

Y así, en un pasillo del sótano en el club de campo, Swift recita su discurso de dama de honor, que ha memorizado por completo.

No tengo que deciros que el discurso de dama de honor de Taylor Swift es genial. Por supuesto que es genial.

Un dato sobre esta boda: Britany y Ben tomaron la brillante decisión, que aparentemente se está convirtiendo en algo entre las novias del siglo XXI, de pedir amablemente a los invitados no llevar sus teléfonos. Así que desde la ceremonia hasta las declaraciones, la gente sí que prestó atención a la novia y el novio – se centraron, se rieron y vivieron el momento. “Todos nuestros invitados estaban presentes,” me dijo Britany después. “Esto significa mucho para mí por parte de cada uno, por desconectarse de las distracciones y disfrutar del momento.”

Cuando llega el momento, Swift coge el micrófono y recita su discurso de dama de honor con la calma imperturbable de alguien que hace este tipo de cosas delante de 50.000 personas. Cuenta la historia de enamorarse de Ben y su corte de pelo en la guardería y la fiambrera de Lego. Habla de cómo, cuando eran pequeños, Britany era más física y ella era más verbal. "Esencialmente lo que tenían estos dos bebés era que cada uno estaba formado con lo que le faltaba al otro", explica Swift. "Uno no sabía andar bien. Uno no sabía casi hablar. Y curiosamente, asumimos esas exactas personas a día de hoy cuando estamos borrachos… Dadnos una hora.”

La sala entera se volvió loca.

Unos segundos después, Swift ya tiene a todo el mundo llorando cuando habla sobre el “amor verdadero” que ve entre Britany y Ben. “El amor verdadero no te hace un lío en la cabeza,” dice ella. “El amor verdadero simplemente lo es. El amor verdadero simplemente perdura. El amor verdadero se mantiene. El verdadero amor pasa página tras página.

(Os dije que era un discurso bueno.)

Posteriormente, habrá pastel. Más tarde, habrá baile, las chicas de las flores conseguirán una historia que explotará por completo las mentes de sus compañeros en la escuela el lunes. Más tarde, la banda de la boda será Swift en el escenario, donde cantará "Shake It Off" para su amigo de la infancia en su noche de bodas y a un público que, por primera vez en la historia, no la apunta con 10.000 móviles. La noche – todo el fin de semana – es de novela. ¿Conoces la novela “You Can’t Go Home Again” de Thomas Wolfe? A veces es muy cierta.

Pero Taylor Swift lo hizo.

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